Vivimos en un mundo en donde todos los valores tradicionales son socavados, minados y destruidos por las nuevas corrientes escépticas y anticristianas que pululan por ahí. Supuestamente Honduras es un país “cristiano”, y la gran mayoría de las sociedades occidentales dicen fundamentar sus valores en la doctrina cristiana. Esto evidencia que si se altera la realidad de Jesucristo, todos los valores, ya decadentes, se derrumban. Mientras el celo Islámico envuelve occidente de forma radical, la indiferencia de los cristianos permite que se haga escarnio de la persona de Jesús, nuestro modelo e inspiración occidental.

            Desde años atrás, en 1970, Andrew Lloyd Webber trajo al tapete una nueva forma de ver a Jesús y  realizo una comedia que aparentemente presento a un Jesús amante de María Magdalena, fue la obra rock intitulada “Jesucristo super estrella”. Poco tiempo después (1988) aparece la película “La última tentación de Cristo”, cinta producida por Martin Scorsese y que pretendía describir de manera detallada la vida de Jesús y sus relaciones con María Magdalena. Después vimos en el 2001 la proyección en nuestros cines de la película «The  Body» (El Cuerpo), protagonizada por Antonio Banderas y en la cual se manejo la teoría de que Jesús no resucito. Ignoro  cuánta gente llegó a verla, pero en el mes de marzo ya no se proyectaba ni en los cines de reestreno, lo que no es de extrañar, dada la frialdad espiritual de la sociedad moderna, y en la misma se ponía en tela de juicio la resurrección de Jesús. Todas estas producciones, y otras más como “El código Da Vince” de escritor Dan Brown  han tratado de minar la persona de Jesús con el fin de debilitar la fe cristiana en los evangelios, y destruir así el cristianismo.

            Se dice que  está por estrenarse una película que sobrepasa los límites de lo que es ficción, para hacer una burla degradante de la persona de Jesús y sus discípulos. Dicha producción se titula “Corpus Chisti" que traducido del latín significa “El Cuerpo de Cristo”, y la cual está programada para exhibirse  entre los meses Junio y Agosto de este año (2010) en los cine de  América. Supuestamente esta comedia, Corpus Christi, es una versión filmada de la controvertida obra de Terrence McNally del mismo nombre que representa a Jesús y a sus discípulos como homosexuales. Una obra –dicho sea de paso- que sólo estuvo en cartel 4 semanas en Londres, a finales de 1999, y que se repone de de vez en cuando en sesiones aisladas  debido al interés de algunos grupos “alternativos” tienen de esta comedia. Dicha película se considera una producción indecente que no debería permitirse en  la sociedad cristiana, pero debido a la libertad desmedida que destruye valores, nada podemos hacer, a menos que se iniciemos un boicot hacia la misma si es cierto su llevada a la pantalla, como hicieron los Islámicos cuando se hizo una película de Mahoma, la cual tuvieron que dejar d exhibir por las presiones de los países islámicos. Esta película de Mahoma tenía el único error de presentar físicamente a un artista haciendo el papel de Mahoma, y ellos no permiten que se use la figura de su profeta para obras teatrales. Sin embargo, los países cristianos permitimos no solo que se presenten actores como Jesús, sino que se hagan burlas del mismo con falsas teorías que desacreditan el valor del Nuevo Testamento, lo cual permitimos, dejando de esta forma  que se  socaven los pocos valores que le quedan en las Iglesias Cristianas.

            ¿Cuál será la posición de la Iglesia Evangélica y Católica frente a tal repugnante película? Se dice que cuanto más se prohíba, mas propaganda se la hace y en cierto sentido es una gran verdad, pero tampoco podemos quedar callados ante este tipo de afrenta a nuestro Salvador y Señor. Es por ello que debemos defender aquello en que creemos y detengamos esta burla de Jesucristo, Nuestro Salvador. ¿Cómo nos vemos como cristianos?  Es tiempo de emprender acciones que detengan las falsedades y denunciemos aquello que nos destruya los valores y nos lleven hacia una apostasía generalizada. La pregunta del caso es ¿Que podemos hacer para que no se profane más el nombre de Jesús? A ti te dejo la respuesta.

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